Cuando este CeTáCeo anda lejos de las costas españolas (suspiros de España…) le da más pereza todavía meterse al Interné y actualizar cosas. Así llevamos meses.
Me mandan esta captura de pantalla del ínclito neopagano y «sacerdote» cismático quitense Francisco Núñez «del Arco» Proaño, delegao de VOX y de la FCTC y «prior general» de no sé qué orden de fantasía y estafa en Ecuador:
Entro al Facebook de mi mujer y sí, efectivamente, es una publicación del quiteñito de hace tres días. Unas cuantas más, recientes también, son neopaganas descaradas. A éste le llamaba «defensor de la fe», o algo equivalente, el Yunque secretario general de la FCTC en el mismo actito donde esta sucursal de VOX le imponía la boina roja a este sujeto, que dice «latinoamericanos», que ve como su destino inventarse, como sus referentes nazis, una «hispanidad» contra la Iglesia y contra el Papado. Si acaso tolerando un «catolicismo positivo» no cristiano, o un «cristianismo» gnóstico y mágico.
Es simpático cómo las entradas anteriores del CeTáCeo sobre estos personajes les han irritado. Al entrar hoy en el blog me encuentro con un comentario amenazante, de ésos perfectamente denunciables, pero que afecta saber quién es el CeTáCeo (o eso me parece; es enrevesado, escrito seguramente bajo los efectos del alcohol o de las drogas) y marra del todo. El buscador de IP indica que la conexión es desde el mismo centro de Salamanca, bella ciudad por la que este CeTáCeo no pasa hace un siglo, literalmente. ¿Será un voxer?
Bergoglio «ordenando» a una mujer el 23 de enero. Lean más abajo: es sólo medio broma
Cuando este CeTáCeo surcaba de joven los mares eclesiásticos, «ministro de Dios» era el sacerdote, exclusivamente. «Ministro de la Eucaristía» podía serlo el diácono (diáconos de verdad), porque podía tocar y repartir la comunión.
Enseguida se deshizo todo aquello y bajo la bota del Novus Ordo de Montini se deshicieron también las órdenes sagradas. En el establishment vaticanosegundista desapareció la tonsura, desaparecieron las órdenes menores, desaparecieron los subdiáconos y hasta las consagraciones episcopales, convertidas en «ordenaciones episcopales». Y empezaron a aparecer los seglares, y enseguida las seglares (o «laicas», como les dicen), haciendo «lecturas» y luego de todo en las «celebraciones eucarísticas», para que el presidente de la asamblea concelebrante (el presunto sacerdote) no se cansase.
En la jerga de la nueva iglesia reaparecieron entonces los «ministerios». Como el principio rector del Novus Ordo es el caos creador (solve et coagula), esos nuevos ministerios (no confundir con la estación de metro madrileña) han ido así como consolidándose. Está el de «catequista», que no se sabe muy bien qué es, porque sirve para que los y las «catequistas» hagan todo lo que presuntamente tendría que hacer el presunto sacerdote. Y el de «lector», que al parecer es el beato, la beata o lo beate que ahora representa a la iglesia docente: «Recibe el libro de las Santas Escrituras y transmite fielmente la palabra de Dios para que germine y fructifique en el corazón de los hombres» les ha dicho Bergoglio el domingo a la vez que les daba una «biblia» (hasta en esto imitando a los protestantes).
«Lector» es el nombre de una de las órdenes menores, que sólo conservan los tradicionalistas al margen del Vaticano. «Ministerio» evoca las órdenes, incluso las mayores.
Quienes no vean que ya no hay ni un paso de esto a la «ordenación sacerdotal» de mujeres, es que no tienen remedio. El establishment vaticanosegundista es la anglicanización mundial de los excatólicos.
Si llegamos al próximo verano, a lo peor vemos formación de lectoras, catequistas y acólitas en los campamentos «Cruz de Borgoña».
Ah, ya. Que en las «misas» de la FCTC (falsa cétécé) ya se han visto lectoras etc. desde por lo menos los años ochenta. Que ellos están «siempre en comunión con la Iglesia Católica», como dicen en un minusválido comunicado del día 15, identificando la Iglesia Católica con el establishment vaticanosegundista.
Mencionaba anteayer este CeTáCeo los convolutos recibidos. (Convoluto: simpático hallazgo lingüístico del corruptísimo y difunto embajador alemán Guido Brunner, gran amigo de Juancar). También los había electrónicos; pero tras desaparecer el email de Hispavista, no le di el nuevo a nadie, y navego mucho más tranquilo.
El caso es que allá por 2016, me parece, alguien me hizo llegar unos enlaces y unas imágenes. No me parecieron importantes entonces y no les hice caso. El caso es que el ahora «famoso» Francisco Núñez Proaño había estado mendigando la atención de Don Sixto y de la Comunión Tradicionalista; éstos se informaron en Ecuador y le fueron dando amables largas y luego corteses negativas. Corteses negativas que, al parecer, tuvo la osadía de remitir a otros como prueba de su estrecha relación con la Comunión Tradicionalista (la de verdad, no la cétécé del Yunque/VOX/Pérez-Roldán). Aquí preocupó a alguno que hizo acopio de información para remitir a quienes consultaran. Ése es el convoluto que le llegó al CeTáCeo.
¿Qué dirían ustedes si el presunto historiador ecuatoriano al que los de la FCTC le han impuesto la boina roja, como pueden ver en la entrada anterior (y unos satélites suyos le han impuesto también ¡un morrión! en presencia del ínclito Yunque secretario general de la cétécé; véanlo y que no se atraganten de la risa https://youtu.be/_zWrjNUGyko) resultara ser, entre otras cosas, un falso sacerdote y hasta falso obispo de una secta «ortodoxa»? Pues, tachán, ¡lo es, lo es! Reportaje fotográfico de su «ordenación» por una «iglesia ortodoxa autocéfala bielorrusa» que no es reconocida por ninguna de las «iglesias ortodoxas» oficiales, las cuales le niegan canonicidad y sucesión apostólica; y que además de ser cismáticos y herejes focianos, «ordenan» también diaconisas y sacerdotisas, como puede verse en las fotos siguientes.
Pueden hacer clic para ampliar cada foto. Para esta secta, Francisco Núñez Proaño es «Cornelius». En el pie de foto original de la quinta imagen se podía leer: «Los cuatro, Teófano, Cornelius, Franc, Arcadio». En el pie de foto de la sexta se leía: «Sacerdotes y obispos». En realidad se ve que ni para herejes de los herejes focianos son serios los amigos de Núñez Proaño. Los ornamentos que se ponen son una mezcla de prendas romanas Novus Ordo con alguna casulla tradicional también romana y unas cuantas imitaciones de fantasía, bastante mal hechas, de las que usan los orientales.
En la entrega de esos desvergonzados premios «Hispanidad Carlos Etayo» que prodiga la falsa cétécé, antes de hacer que le impusieran la boina roja al pope Francisco Núñez Proaño, el yunque Javier Pérez-Roldán decía no sé qué de guerra a los «sin Dios». Ése problema no lo tiene con el ecuatoriano, que no sólo tiene un Dios, sino muchos, como veremos. O, como veremos también, uno solo: él mismo, en la típica tradición del luciferianismo en que caen todos los neopaganos.
Para blogs oficiales, el blog oficial del propio Francisco Núñez Proaño: https://coterraneus.wordpress.com/. En él encontrarán, junto con entradas favorables al carlismo y al hispanismo (pero siempre entreveradas de «originalidades»), unas líneas dominantes: orientalismo, neopaganismo, filonazismo (aunque también compadree con liberales de tomo y lomo), autoexaltación fanática, ataques al papado (no al de ahora, sino al de siempre) y anticristianismo a veces larvado y a veces virulento. Sin que falten toques de homoeroticismo.
Y para que no me digan que la última entrada es de hace más de dos años, que habrá cambiado y blablablá, les dejo una publicación de su Facebook de hace un año:
Efectivamente, Giulio Evola (1898-1974), alias «Julius Evola», ocultista, esoterista, neopagano y fanático anticristiano, pensador de cabecera de Francisco Núñez Proaño, el nuevo «boina roja» de la falsa Comunión Tradicionalista Carlista (FCTC) y hombre de VOX en Ecuador. «¡Hazlo por él!», dice Núñez Proaño.
Me preguntaron anteayer si sabía quién era el homenajeado en este estomagante vídeo de «Tradición Viva» (invento de Javier Pérez-Roldán Suanzes, de cuyas judaizantes andanzas ya habló este CeTáCeo hace años; ahora es de la directiva de HazteOír.org, o sea, de la principal agencia del Yunque en España, y «secretario general» de la falsa cétécé). Véanlo bajo su propia responsabilidad: https://youtu.be/YpRBubeHPWg
De entrada ese nombre, Francisco Núñez del Arco, no me sonaba. Aproveché un Skype con un colega de la Armada del Ecuador para preguntarle, y me dijo: — Es el que funge de representante de VOX acá. Se llama Francisco Núñez Proaño. Lo «del Arco» se lo puso para darse importancia.
Entonces empezó a sonarme algo. Hace unos años recibí un convoluto de esos que al CeTáCeo le mandaban de vez en cuando. Pero hoy no voy a buscarlo, todavía: lo reservamos para futuras entregas. Que van a ser hasta más reveladoras que la de hoy.
Mi mujer dice que todo el mundo está en Facebook. Todo el mundo menos este CeTáCeo. Así que le pedí que me dejara hacer una búsqueda y, tachán, apareció el perfil del homenajeado por Pérez-Roldán y su FCTC. (También está en el vídeo Telmo Aldaz, que es quien le impone la boina al quitense de VOX. De Aldaz, a quien han puesto de Président de la République cétécé, sólo hay que ver su Twitter para darse cuenta de que también es de VOX o muy próximo. Pero quienes le conocen me dicen que en todo lo demás es lo más opuesto de su Secretario General; que es un tipo noble, y que sencillamente no se entera).
Tachán, apareció. Un perfil con un montón de publicaciones públicas, abiertas y sin proteger, para cualquiera que quiera verlas; una mina. Para empezar, por ejemplo:
Francisco Núñez Proaño despacha electrónicamente con Hermann Tertsch, uno de los dirigentes de VOX más ultrasionista, judaizante y proestadounidense; con un historial de defender todo lo que sea malo, variado según las etapas. El ecuatoriano lo elogia, por supuesto.Más de sus oblativas relaciones con VOX, que ahora son correspondidas en España. Núñez Proaño se deshace en particular en elogios ditirámbicos a Víctor González Coello de Portugal, vicepresidente de VOX y captador de fondos del partido, inhabilitado como administrador de empresas por la Audiencia Provincial de León por haber llevado al cierre a una empresa viable y echado a la calle a 60 trabajadores. Por eso el partido no lo presenta por León, sino por Salamanca. Entre otras historias similares.
Claro, claro. La falsa cétécé, como recientemente le echaba en cara la Comunión Tradicionalista de verdad (este CeTáCeo se sorprendió, por cierto: las autoridades de la Comunión suelen pecar de educaditas, cortesísimas y tolerantes; a ver si dura la línea clara) no tiene gente en Hispanoamérica. Así que se la presta VOX; es de suponer que para que su negociado «tradicionalista» no parezca tan enanito como en realidad es.
El problema, claro también, es que los contactos de VOX no resultan aceptables ni de lejos para los carlistas. Para los carlistas de verdad, claro; para la FCTC vale todo.
El usurpador Alfonso (XIII) en el Facebook de Francisco Núñez Proaño.
Es verdad que los de la falsa cétécé tienen ya experiencia en hacer de alfonsinos contra los carlistas. Basta recordar los aniversarios de la falsa y burlona consagración al Sagrado Corazón perpetrada por el segundo Alfonsito. Pero ¿qué dirán del anticatolicismo de su homenajeado voxero ecuatoriano, por ejemplo?
Hace rato que por radio macuto circulan rumores de rebelión por parte de una serie de sujetos (pocos) que tuvieron relación con o militaron algún tiempo en la Comunión Tradicionalista. Tipos que se odian entre ellos. Pero nada une más que el odio común. El olímpico desprecio que las autoridades de la Comunión muestran hacia sus pendejadas (también hacia las mías, ay; pero este CeTáCeo no tiene alma de traidor, a diferencia de los sujetos de este relato) les pone de los nervios.
Parecería que escogieran ser proverbial cabeza de ratón antes que cola de león. Mas hete aquí que seguramente sean más bien colas de ratón, pues quien lleva tiempo moviéndoles los hilos sería el judaizante secretario general de la falsa cétécé.
En todo caso, viendo las afinidades fachas de los ratoniles sujetos, mi corresponsal de radio macuto ha dado con el nombre de su operación: la rebelión de los voxers.
Próximamente en cartelera en su «asociación cultural tradicionalista» más cercana.
— Fachas de m*erda… Murmuró el CeTáCeo, con gesto resignado, desusado en él.
— CeTáCeo, está usted muy mal hablado.
— Es que los fachas me llenan de m*erda la cuenta de Twitter. La dejan convertida en aguas fecales, que es donde a ellos les gusta chapotear.
— Creía que era usted más de decir «rojos de m*erda», CeTáCeo.
— Lo mismo me da que me da lo mismo.
— Pero rojos y fachas se atacan entre ellos.
— Pláticas de familia de las que nunca hice caso.
— Venga, hombre. No serán tan malos los fachas cuando el boletín electrónico del secretario general de la cétécé, «Tradición Viva», está lleno de alabanzas a falangistas, neopaganos y demás camaradas.
— Usted me lo confirma. El libelo electrónico del abogadillo judaizante es un sumidero de aguas fecales. La FCTC ya es sólo una pantallita para fachas, con predominio creciente de la subespecie facha-liberal de los voxeros. Por eso huele tan mal allí donde se meten sus lectores y colaboradores.
Pues como hoy es el Domingo de la Sagrada Familia, vamos a poner una meditación dialogada. Vean qué moderno es el CeTáCeo: dialogada, como en las no-misas. Y como hasta el dos de febrero seguimos en tiempo de Navidad, ponemos arriba una ilustración ad hoc, de cuando Ratzi okupaba los aposentos papales y los opusitas le hacían la ola (como ahora se la hacen al Bicario).
—CeTáCeo, ¿se ha dado cuenta de que las familias del Opus ya no son tan numerosas como antes?
—¿Numerosas? Ya van quedando pocas familias del Opus, gracias a Dios.
—Eso también. Pero no, CeTáCeo. Señalo que tienen menos hijos que antes.
—Es natural. O sea, es antinatural, pero fácil de comprender.
—¿Cómo es eso?
—Acuérdese, hombre. En sectas como el Opus los cambios son a la voz de ¡ar! Años setenta: las del Opus se cubrían la cabeza en los templos. Años ochenta: todas descubiertas. Años ochenta: las del Opus vestían todas falda. Años noventa: unas conservan faldas, pero más cortas; otras, en pantalones «modestos». Nuevo siglo: todas en pantalones. Años setenta: sacerdotes del Opus en sotana. Años noventa: en traje negro y alzacuellos, a lo protestante. Ahora: depende del lugar, todavía. En algunos sitios, ya en chaqueta y corbata.
—Ya. Pero no veo la relación con la disminución del número de hijos en sus familias.
—Pues es fácil. Es con su disminución en general. Mire: antes, los de la «clase de tropa» que se casaban servían para proporcionar nuevos miembros (sus hijos) al Opus y para suministrar dinero a la secta, además de una cierta «normalidad»: los supernumerarios al menos no eran eunucoides como los numerarios. Pero ahora los hijos de las familias del Opus no suelen caer en la red de la secta: más tarde o generalmente más temprano se alejan. El mismo clima laico que el Opus tanto ha contribuido a crear («vocación laical» y laicismo social y político) no facilita la captura de pobres gentes de buena fe para que la secta las transforme en zombies numerarios. Así que la «dirección espiritual» constriñe ahora a las familias opusitas a tener menos hijos, imitando al resto de los vaticanosegundistas.
—Sigo sin entenderlo.
—Le digo que es fácil. Los hijos cuestan dinero. En las pretensiones burguesas del ambiente Opus, más dinero todavía. Más hijos, menos dinero para el Opus. Menos hijos, más dinero para el Opus.
—Es usted despiadado, CeTáCeo.
—La realidad es despiadada, como el Opus.
«¡CeTáCeo! ¡Haces falta! ¡Vuelve!», me dicen los que no me quieren bien.
Con lo ocupado que está uno, arriba y abajo de las Columnas de Hércules, desayunándose alguno de los sarracenos que se caen al agua desde las pateras invasoras, o lanzando dentelladas a los llanitos.
En fin, a lo mejor les hago caso. Un poco y de vez en cuando.
El «Venerable» Mario Antonio Conde Conde con «San» JP-2
Protinus inrupit uenae peioris in aeuum
omne nefas, fugitque pudor uerumque fidesque;
in quorum subiere locum fraudesque dolusque
insidiaeque et uis et amor sceleratus habendi.
El Venerable Mario Conde, coronado doctor «horroris causa» por el Venerable Juanito Alfonso, alias Juan Carlos
El colegio filoetarra de la FSSPX en Domezain hace disfrutar a Otegui
Tras casi no cumplir una condena ridícula, ha salido de prisión el portavoz de ETA-Batasuna Arnaldo Otegui Mondragón. Muchos andan indignados. El sujeto en cuestión, feo como sus pecados y su ideología, deforme de cuerpo, de mente y de peinado, causa una repugnancia insoportable a los españoles de bien, a los españoles casi de bien y hasta a los ex-pañoles que fingen serlo. En cambio su liberación ha sido celebrada por el mundo nacionalista y por eso que ahora llaman la izquierda radical, mediáticamente personificada en el raquítico barriguitas con coleta e ínfulas de Lenin y en la bruja de guiñol que preside el Ayuntamiento de Madrid.
Ante la liberación y homenajes públicos y ruidosos al terrorista etarra, secuestrador, extorsionador, atracador y asesino, el PP del «País Vasco», por boca del antiguo alcalde de Vitoria y actual «Vicesecretario Sectorial» Javier Maroto (este CeTáCeo no sabe si desciende del traidor General Maroto, pero en cualquier caso antepasado y descendiente se merecen mutuamente), exige que se regule… la «maternidad subrogada», es decir, la compraventa de bebés para uso y abuso de los Marotos de ambos sexos: bujarrones y tortilleras. Ante todo las prioridades.
Sospechamos que en el mundo «tradicionalista» también se ha celebrado la puesta en libertad de Otegui. ¿Le ha preguntado alguien al abate peneuvista David Aldalur, de la Fraternité-Saint-Pie-X, director de la École-Saint-Michel-Garicoïts de Domezain, protegido del obispo tradi-sionista Bernard Fellay? A lo mejor le hace un Te Deum (rúbricas de 1962, bien sûr) el Domingo de Ramos, recibiéndolo sus alumnos con palmas y banderas piratas rojiblancoverdes («ikurriñas»).
Estos críos no son alumnos de la Hermandad de San Pedro, sino de la Hermandad de San Pío X. ¿Tal para cual?